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Semana mundial de la lactancia del 1 al 7 de Agosto
Ventajas de la leche materna: leche fresca, natural, a la temperatura justa, económica y ecológica.
La leche de mujer está especialmente adaptada a las características digestivas y metabólicas del bebé ya que la leche de los 4 a 6 primeros días se llama calastro, un líquido viscoso y amarillento de gran valor nutritivo y muy fácil digestión.
El calastro está compuesto por proteínas, grasas, sales minerales, vitaminas, hormonas, agua, enzimas y anticuerpos. El periodo de lactancia es decisivo para establecer el vínculo afectivo y emocional entre madres e hijos.
A su vez, el calastro tiene dos funciones específicas, por un lado protege la glándula mamaria de las infecciones externas y por el otro, facilita la expulsión de las primeras heces del bebé al ser purificador y laxante.
La leche materna siempre es fresca, libre de contaminantes y manipulaciones y su temperatura es la idónea. Es muy económica y no necesita preparación previa.
Para dar el pecho, hay que tener en cuenta las normas para amamantar:
- Alimentos que favorecen la producción de leche
- Alimentos que hay que evitar en la dieta de la madre
- Duración y repeticiones de cada toma
- Higiene de las mamas
- Higiene en la alimentación maternal
- Lactancia en casos especiales: cesárea, gemelos, prematuros
- Situaciones en las que no se debe dar el pecho
- Intolerancia
- Periodo de destete
Lactancia artificial
Generalmente se trata de leche derivada de otros animales mamíferos como la vaca, la cabra o burra. La más extendida es la leche de vaca en sus diversas formas: natural, condensada, evaporada, acidificada, en polvo, adaptada y de seguimiento.
Se recomienda que los primeros 6 meses de vida sean alimentados como mínimo solamente por leche materna.
